En el Carnaval de Río, las escuelas de samba se han centrado en burlarse del cristianismo, exaltar el ocultismo y distorsionar los símbolos bíblicos en nombre de la libertad de expresión: “Profanan el alma y empobrecen el espíritu”. Adán e Eva en “Delirios de un paraíso rojo” fue la propuesta de la escuela Salgueiro en su desfile del Carnaval, con el objetivo de “valorar la libertad de expresión”, pero despreciando totalmente el respeto al cristianismo.
La “primera mujer” mencionada en la Biblia, fue representada como una “Eva malvada” por la bailarina Maryanne Hipólito: “Será un Adán y una Eva diferenciados, libres, calientes, fuertes”, dijo entre risas durante las entrevistas. “Es un paraíso diferente, lleno de emoción y alegría”, comentó Carlinhos do Salgueiro, que interpretó a Adán vestido de rojo, imitando la figura del diablo. El tema recibió muchas críticas.
“Tantos temas para que estas personas pueden abordar, pronto atacarán al Creador. Esperemos la mano de Dios para el pueblo brasileño. Dios tenga piedad de ellos y de todos nosotros porque pronto vendrá el castigo”, escribió un internauta en el Instagram de Portal G1. “¿Por qué traer las cosas de Dios a esto? Chicos, ¿no es más fácil para ellos disfrazarse de otras cosas sin tener que meterse con el cristianismo? Cada año están desmoralizando a Dios y exaltando a Satanás”, escribieron otros internautas.
“Es una falta de respeto a Dios”, “Pura blasfemia contra el Creador”, “Este año el diablo vino con todo. Lo más gracioso es que quieren verse normales”, escribió un internauta refiriéndose a “Jesús ahorcado”. Durante el desfile, sin embargo, el hombre vestido como Jesús y que debería haber sido destacado, se sintió enfermo y tuvo que ser trasladado en ambulancia a un hospital para ser examinado.
Al comentar sobre el verdadero significado del Carnaval, el pastor Marco Feliciano dijo que “la gente se disfraza de lo que quiere para unos días de celebración y luego vuelve a ser lo que era”. “El carnaval tiene como lema la idea de la subversión del orden, donde las cosas dejan de ser como son para ser temporalmente todo lo contrario”, comentó.
“Los excesos cometidos en nombre de la alegría profanan el alma y empobrecen el espíritu, destruyen sueños y amputan futuros prometedores”, destacó. Según el pastor Rodrigo Mocellin, los disfraces utilizados en 2023 “retratan perfectamente lo que es el Carnaval”, dijo sobre las representaciones demoníacas que se exhiben en las avenidas.
“Es claro que todo esto se hizo para afrentar la fe cristiana”, reflexionó al comentar que los juerguistas no deben quejarse después, por si a su religión también se le critica de alguna manera. “El carnaval es el momento en que la gente pone todo su odio contra Dios. El carnaval tiene todo que ver con satanás”, relató, destacando que la gente no pone límites a sus pasiones.