La cadena de comida rápida Subway fue acusada de discriminación religiosa contra los cristianos después de que una franquicia en Estados Unidos se negara a atender a clientes por llevar camisetas antiaborto y anti-LGBT.
El fin de semana pasado, el predicador callejero David Grisham y tres amigos cristianos fueron a cenar al Subway en Wisconsin mientras asistían a la Convención Nacional Republicana en la ciudad.
En la fila para hacer sus pedidos, un camarero se negó a atender al grupo de cristianos después de leer frases en sus camisetas, entre ellas “El aborto es asesinato” y “La homosexualidad es un pecado”.
El momento fue grabado y compartido en las redes sociales. En las imágenes, uno de los cristianos pregunta a la empleada si se niega a atenderlos, y la mujer confirma.
“Rechazo el servicio”, dijo, mientras continuaba preparando el sándwich de otro cliente.
Cuando se le preguntó por qué, añadió: “Esa es una cuestión personal”. Entonces, uno de los cristianos preguntó: “¿Por mi camisa?” Y el asistente respondió: “¡Sí!”
En una publicación de Facebook, David denunció el caso de discriminación religiosa: “Un pastor local nos estaba invitando a cenar y sólo llevábamos dentro menos de un minuto y no habíamos dicho una palabra a nadie. Ella solo vio nuestras camisas y maldijo y dijo que no nos quedaría bien”.
Criticó: “Las personas razonables son razonables cuando se trata de diferencias de opinión y son lo suficientemente profesionales como para servir a alguien sin dejar que sus emociones entren en modo de escuela primaria y se quejen públicamente”.
Reseñas
Luego de que el video del caso se viralizara en las redes sociales, los internautas protestaron contra Subway y acusaron a la cadena de intolerancia religiosa contra los cristianos.
“No me importa qué tipo de respuesta se le ocurra a Subway. Nunca volveré a poner un pie en una de tus pequeñas tiendas sucias”, escribió un usuario en la publicación de Facebook.
Otra persona preguntó: “¿Subway discrimina a las personas que usan Hijab o Yamaka u otros símbolos religiosos?”
“Si llevaba una camiseta del orgullo gay y un empleado se negaba a atenderlo, en algunos estados llamarían a la policía por discriminación”, dijo un tercero.
Laura Gray de Kentucky escribió: “Trabajo en Subway en Dawson Springs y siempre que estés en la zona, puedes venir aquí”.
Según la Ley de Derechos Civiles de Estados Unidos, los restaurantes que discriminan a los clientes por motivos de religión son un delito.
