Una familia holandesa de Urk, ciudad del centro de Países Bajos , fue rescatada con vida tras más de 10 horas bajo los escombros de un hotel que se derrumbó en la ciudad alemana de Kröv.
El derrumbe de gran parte del edificio, ocurrido la noche del miércoles (07), afectó al padre, la madre y el hijo de 2 años, quienes tras el rescate quedaron fuera de peligro.
Tras la liberación , la mujer agradeció a Dios en las redes sociales: “¡Toda gloria a Él!”
Se advirtió a los huéspedes del hotel, situado cerca del río Mosela, que evacuaran inmediatamente debido al riesgo de colapso. Pero la advertencia llegó demasiado tarde.
Cuando los huéspedes intentaron escapar, el hotel se derrumbó.
Rescate de emergencia
Los servicios de emergencia se movilizaron en masa para rescatar a las personas atrapadas bajo los escombros, pero el trabajo se complicó por el riesgo de nuevos derrumbes.
Entre los enterrados se encontraban Edi Hoefnagel-Visser, de 23 años, y su hijo Jamie, de casi dos años, quienes fueron rescatados por los servicios de emergencia.
La madre y el hijo sobrevivieron milagrosamente al estar protegidos bajo una puerta que cayó durante el colapso del hotel, sirviendo como escudo contra los escombros que caían.
Mark Hoefnagel, de 26 años, padre de la joven familia, fue el que estuvo atrapado bajo los escombros durante más tiempo. Durante la mañana, varios mensajes en las redes sociales informaron que había sido rescatado, pero la familia desmintió la información al diario holandés Het Urkerland.
Unas horas más tarde, la noticia confirmó que Mark también había sido rescatado con vida. La madre y el hijo sufrieron heridas leves; Mark también se encuentra fuera de peligro, a pesar de haberse fracturado el brazo y sufrido daños en el esófago y puede requerir cirugía.
Los tres fueron trasladados al hospital. En Urk hubo una gran movilización de oraciones por la familia: “Estamos profundamente solidarios y rezamos por las familias de todos los afectados por los escombros”, dijo un portavoz del municipio a la emisora de radio y televisión Omroep Flevoland.
Ora por nosotros
El periódico holandés Reformatorisch Dagblad habló con el padre de la mujer que quedó atrapada bajo los escombros con su hijo.
Dijo que recibió varias llamadas de su hija mientras aún estaba enterrada.
“Padre, nuestro hotel se derrumbó. Debes orar por nosotros ahora”, dijo.
El hombre respondió al llamado de su hija y, como en muchos otros hogares de Urk, se oró a Dios pidiendo liberación.
“Invocamos al Señor, pedimos vida para todos nuestros hijos y reprendemos el poder de las tinieblas y de la muerte en el nombre de Jesús”, dijo el hombre al diario sobre su actitud.
Y celebró su fe diciendo: “Funcionó. Fue un momento maravilloso”.
‘Toda gloria a Él’
La mujer también se pronunció sobre los hechos. Compartió una foto de ella con su hijo en las redes sociales y confirmó que los tres están a salvo.
“Estamos bien después de haber estado atrapados bajo los escombros durante diez horas”, escribió.
“Acabamos de recibir la excelente noticia de que Mark está fuera de peligro y finalmente va de camino al hospital. Estuvo en condiciones muy precarias durante más de doce horas y pensó que no sobreviviría. Las últimas horas estuvieron llenas de esperanza y miedo, esperando un rescate a tiempo. ¡¡¡A Él toda la gloria!!!”
Causas del accidente
Según un portavoz de los bomberos, en el momento del derrumbe se encontraban 14 personas en el edificio de Kröv. Los medios alemanes informaron que dos personas murieron y varias resultaron heridas.
Según DW, las causas del derrumbe aún no han sido confirmadas. Una de las líneas de investigación es analizar si las obras realizadas el martes, pocas horas antes del desastre, pudieron haber contribuido al derrumbe.
El edificio, originario del año 1700, fue ampliado con dos plantas más en 1980.
