Lourdete Machado, de 42 años, es enfermera de profesión y tiene un posgrado en UCI, pero por su falta de experiencia en centros médicos no tenía trabajo, a pesar de que existe una gran demanda en los hospitales por la pandemia y la gravedad de ésta dentro de Brasil.
«Desde que me gradué, en 2016, solo brindé asistencia como autónomo, pero siempre le pedí trabajo a Dios. Incluso participé en algunos procesos de selección, pero los gerentes siempre optaron por colegas con experiencia», dijo a un diario local.
Ella siendo madre de una niña de 7 años, tomó la decisión de realizar un cartel con su curriculum y pararse en un semáforo de la región de Asa Sul de Brasilia.
Enfermera ora por trabajo y consigue dos empleos al ser guiada por Dios
«Pido su ayuda, estoy desempleada, soy madre de familia, tengo una familia que mantener. No acepto efectivo. Solo quiero trabajo, soy enfermera, tengo un puesto en UCI y obstetricia, no tengo experiencia, solo pido una oportunidad. ¡Dios los bendiga a todos y muchas gracias! ¿Aceptas mi currículum?», se leía en el cartel.
Dicha estrategia usada para conseguir empleo fue dada principalmente por Dios en sus tiempos de oración, a quien le oró para conseguir un empleo y así poder cubrir sus necesidades.
«Siempre he tenido mucha fe, hablo mucho con Dios, y en una de mis oraciones le pregunté en qué me estaba equivocando porque no puedo conseguir un trabajo vacante en mi área», contó.
Oración en los tiempos difíciles
«Durante la oración le pedí a Dios una estrategia para volver a participar en un proceso de selección para poder trabajar, y Él me la dio: salir con un cartel y pedir trabajo», agregó.
Y fue durante un almuerzo con una amiga que pensó en la idea del cartel, «Es Dios enviando señales», pensó.
Luego de unos meses y sin realizar el cartel, a su esposo lo despidieron, «Si ni él ni yo conseguimos trabajo, tendríamos que volver a la granja», expresó.
Crecen los problemas
Pero entonces realizó el cartel en una imprenta incluso sin poder pagarlo, pero la dueña del negocio conmovida con la historia no quiso aceptar el pago unos días después, y decidida salió a la calle a pararse en un semáforo concurrido.
«La encargada de la imprenta estaba tan conmovida que no quiso aceptar el dinero. Al día siguiente salí a la calle y cuando pasé un semáforo me sentí bien y pensé, me quedo aquí. Estaba muy nerviosa, aprensiva y no sabía realmente qué pasaría, hasta que llegó un tipo que vendía palomitas, me habló, me tranquilizó y me dijo: ¡lo que viniste a buscar aquí, lo vas a conseguir!», relató de su experiencia.
Y solo pasaron unas horas cuando la primera oferta de trabajo llegó, una mujer se le acercó para tomar datos de su curriculum y así colocarlo en el periódico, «Una mujer llamada Daniela se me acercó y me dijo que me ayudaría. Luego regresó y llegó con una estación para registrar mi situación, muy cansada, quemada por el sol y con un celular roto, lo dejé. Dijo que estaría en el periódico», dijo.
Testimonio cristiano
Y fue al día siguiente que recibió la llamada de otra oferta de trabajo, la Asociación de Salud en Movimiento que dirige hospitales de campaña en Brasilia la contactó y el Grupo Santa también la llamó el mismo día, teniendo dos ofertas en puerta para un empleo.
«Era de la Associação Saúde em Movimento, que dirige algunos hospitales de campaña aquí en Brasilia. Me ofrecieron un trabajo y me pidieron que fuera al Hospital PM para que pudieran hablar conmigo. El mismo día, Grupo Santa también me llamó, y también hizo arreglos para que fuera al hospital. Todo sucedió de forma natural y comencé a trabajar en ambos. Otras empresas también me llamaron y yo estaba muy agradecido por las oportunidades. Estaba tan agradecido y feliz por todo lo que Dios me ha dado», relató.
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