En una aldea islámica de Kenia, un grupo de misioneros asistieron para llevar la palabra de Dios a las comunidades más necesitadas.
Ahí, el misionero Erik Laursen del ministerio Misiones del Nuevo Pacto, conoció a un joven que estaba profundamente atado por la brujería.
Para el misionero no era de extrañar, ya que prácticamente todas las aldeas aledañas tenían una profunda relación con la brujería.
Niño atado por la brujería vuelve a caminar tras una fuerte oración
En la aldea, el misionero conoció a un grupo de jóvenes que habían sido víctimas durante años de una maldición de hechicería.
Después que encontraron tótems que brujos habían dejados repartidos en un bosque cercano, lo que provocó que uno de los jóvenes dejara de caminar.
El joven de nombre Emanuel fue llevado a una cadena de oración, anteriormente, al igual que al hospital, pero tras muchos análisis los médicos no pudieron explicar su parálisis.
Ataques espirituales
“Solo puedes imaginar la cantidad de oraciones que se derramaron sobre él, pero fue en vano. Lo llevaron al hospital de la ciudad. El hospital hizo radiografías, análisis de sangre y más, pero no encontraron nada” comentó el misionero.
“Luego supimos que su madre, Margaret, también estaba sufriendo un ataque espiritual extremo. Oramos por ellos en equipo”
“Y al final nos cayó una lluvia torrencial. Emanuel se veía aún más fuerte que antes y oramos para que pudiera regresar a la escuela la próxima semana”, dijo Erik.
Dios limpia la tierra
Tras las oraciones, entró una época de intensas lluvias en la aldea, el misionero asegura que era Dios limpiando la tierra de toda brujería.
Cuando volvió a Estados Unidos, el misionero recibió un grato vídeo, la joven víctima durante años de la brujería, estaba caminando nuevamente.
Por lo que quedó en la aldea como un testimonio vivo del poder de Dios para romper las cadenas de la hechicería.
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